La retención de líquidos se produce como consecuencia de la acumulación de agua en los tejidos de nuestro cuerpo. El problema se origina cuando el cuerpo es incapaz de eliminar todo el líquido necesario, por lo que se produce la llamada retención de líquidos.
Las frutas y vegetales son alimentos bajos en calorías que tienen un efecto diurético natural. Es muy recomendado el consumo de verduras y frutas frescas, especialmente aquellas que tienen un alto contenido de agua como la sandía, la cebolla, los tomates, el apio, los limones, el pepino y la manzana. Estas mantienen tu cuerpo hidratado y gracias a su efecto diurético incrementan la eliminación de líquidos del organismo.